Hace unas semanas decidí escribir una historia que llegara al corazón de todos. Una novela de fantasía moderna y con mi toque especial y bueno a falta de título aquí les dejo una breve introducción.
-Sin título-
La historia se desarrolla en un mundo de fantasía en el cual no existe el día. Cuentan las leyendas que la luz desaparecio y que antes de irse dejó tres objetos de luz pura los cuales le dan el liderazgo a las tres ciudades imperiales.
Los ciudadanos de este mundo no se tratan de otra raza que la de los vampiros. Pero no son tenebrosos, ni ningún amago de vampiro pijo los cuales ahora abundan.
Se tratan de vampiros que actuan como humanos con la pequeña diferencia de la alimentación y de al cualidades casi animales de las que disponen.
La protagonista se llama Eiren y es una vampiro de tres décadas de edad (seis años humanos) que perdió a su madre cuando ella nació. Su padre trabaja para la granja real de una de las tres ciudades y a ella no le quedará más remedio que ser cuidada por la niñera de la princesa.
Irial es la hija de los reyes y tiene la misma edad que la protagonista. Es sumamente repelente y nunca da su brazo a torcer. Ella es privilegiada por ser de sangre real y eso le dota de un gran poder. Todo lo que ella diga se hará.
Con el paso de los tiempos el odio que siente la princesa hacia la plebeya se irá desvaneciendo y llegaran a ser dos grandes amigas. Creceran juntas y se acompañaran mutuamente.
Descubriendo que están echas la una para la otra se harán la promesa de mejores amigas. Eiren será su esclava personal a cambio de que Irial le de un hogar más cerca del castillo.
Setenta años después, y con la edad de cien años (veinte en humano) Ocurrirá una fuerte tragedia que obligará a Eiren a viajar por el mundo de la oscuridad y aclamar sangre. A falta de poder ella sacrificará su amor, volviéndose fría y no pudiendo amar nunca más.
Una historia rodeada de emociones, amistad y grandes lazos. Acción en estado puro y lo más importante un final,... pero es demasiado pronto para llamarlo "Final Feliz"
-Sin título-
La historia se desarrolla en un mundo de fantasía en el cual no existe el día. Cuentan las leyendas que la luz desaparecio y que antes de irse dejó tres objetos de luz pura los cuales le dan el liderazgo a las tres ciudades imperiales.
Los ciudadanos de este mundo no se tratan de otra raza que la de los vampiros. Pero no son tenebrosos, ni ningún amago de vampiro pijo los cuales ahora abundan.
Se tratan de vampiros que actuan como humanos con la pequeña diferencia de la alimentación y de al cualidades casi animales de las que disponen.
La protagonista se llama Eiren y es una vampiro de tres décadas de edad (seis años humanos) que perdió a su madre cuando ella nació. Su padre trabaja para la granja real de una de las tres ciudades y a ella no le quedará más remedio que ser cuidada por la niñera de la princesa.
Irial es la hija de los reyes y tiene la misma edad que la protagonista. Es sumamente repelente y nunca da su brazo a torcer. Ella es privilegiada por ser de sangre real y eso le dota de un gran poder. Todo lo que ella diga se hará.
Con el paso de los tiempos el odio que siente la princesa hacia la plebeya se irá desvaneciendo y llegaran a ser dos grandes amigas. Creceran juntas y se acompañaran mutuamente.
Descubriendo que están echas la una para la otra se harán la promesa de mejores amigas. Eiren será su esclava personal a cambio de que Irial le de un hogar más cerca del castillo.
Setenta años después, y con la edad de cien años (veinte en humano) Ocurrirá una fuerte tragedia que obligará a Eiren a viajar por el mundo de la oscuridad y aclamar sangre. A falta de poder ella sacrificará su amor, volviéndose fría y no pudiendo amar nunca más.
Una historia rodeada de emociones, amistad y grandes lazos. Acción en estado puro y lo más importante un final,... pero es demasiado pronto para llamarlo "Final Feliz"
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